Pronto.

http://www.youtube.com/watch?v=jc11F05pAT4&feature=fvwrel
 Miras tus dedos, entre ellos un puto cigarro consumiéndose que te quita minutos de vida poco a poco. Arde lentamente y aprovechas esos últimos calos que tintan tus pulmones de un color primo de la muerte. Contra una pared de cemento lo apagas, rasgándolo , de abajo a arriba, y tiras la puta colilla lo más lejos que puedes.
Estás hasta los huevos de todo esto.
Te agachas, por primera vez te abrochas con fuerza el nudo de las zapatillas, te recoges el pelo y miras al frente. Cielo de Madrid lleno de mierda ; entre nubes y contaminación, lo abraza una jodida boina de polución que consume poco a poco el alma de sus gentes.
Empieza la lluvia, esa que empapa tu cara. Dejas caer pequeñas gotas sobre tu cara. Sensación de liberación.
Sin pensarlo dos veces, respiras y echas a correr.
 Más rápido, sin pensar en tu aguante que cada vez disminuye más a medida de los tiros que das a una droga sin sentido.
Las gotas se clavan suavemente sobre la piel, y el viento acelera tus ganas.
Todo se vuelca en un momento.
Todo aparece, entre la adrenalina del momento y la esencia de ese instante.
El miedo, la desesperación, el cansancio, la ira, la cólera, el rencor, la fatiga, los nervios, las invisibles ganas, el desprecio, la envidia , los celos, la desconfianza, la melancolía, la añoranza, los gritos, las ganas, la pasión, el morbo, la fogosidad, la fuerza, la superación, la alegría, los errores, los vicios, las caricias, las personas, una única persona.
La vista a un lugar lejos de esta puta mierda de ciudad que lo único que hace es axfisiarte en su mierda.